Quiero más
Se dice que es muy poca la gente que lee y que los buenos lectores se han perdido.
Con la aparición de nuevos entretenimientos, los libros han sido apartados. Cuando no tienes nada que hacer, estas cansado o te apetece desconectar tu acción más inmediata es ir, coger el mando y pulsar el botón de “prog +”. Sin parar. Hasta encontrar algo decente que ingerir (difícil en una televisión donde entre tus elecciones destacan: En antena, a tu lado, aquí hay tomate,… y una serie de divertidos programas con polígrafos, señoras gritando y mamarrachos) o también, enciendes el ordenador y pasas horas delante de la pantalla, dándole a las teclas (que no está mal; renovarse o morir).
Pues bien. No creo que nadie nazca con un libro bajo el brazo y con las ansias de devorarlos. Es decir, que no creo que la pasión por la lectura sea innata, propia de tu personalidad o que si no leías desde pequeño ya puedes pasar página porque no leerás en la vida. Siempre hay un comienzo, una primera vez.
No me refiero a la primera vez que leíste un libro, sino a tu libro. El libro que te hizo reflexionar, que te enganchó de tal manera que no lo soltabas o que lo leerías una y otra vez. Una iniciación a la lectura desde el momento que acabaste esa historia y que abrió una necesidad, la necesidad de seguir. Un “quiero más”. Quiero conocer otros relatos, otros puntos de vista, otras historias, otras aventuras, países, personajes, momentos...Ese libro que despertó a la imaginación o que hizo que te identificarás con los personajes, que te encapricharas con unos, odiaras a otros…En definitiva un libro que te invita a conocer a otros libros.
No todo el mundo tiene la suerte de encontrar su obra instructiva, hay muchos elementos que influyen: la educación, el ambiente, el destino y muchas distracciones que eclipsan a la literatura.
Ya lo sabes. Si ya te has rendido y has admitido públicamente que nada ni nadie te hará coger un libro es porque todavía no has encontrado a tu media naranja y con esa actitud difícil es que surja el amor (ya me entendéis).