Un placer

Un libro es un portal hacia otras vidas, un gran ojo de papel con el que puedes ver todo lo que la imaginación pueda expresar, rozando lo imposible. Como un arte, escribir es transportar a los lectores a otro mundo, una vida alternativa; sumirles en sueños, en aventuras,…una explosión de inspiración que encierra emociones, sentimientos y deseos que afloran en la mente de quien los lee.

30 de enero de 2007

Fuera el telón!


Hacer un mutis, un cambio de escenario, personajes, foro, atrezzo,...Al levantarse el telón, una escena. Empieza la acción. Acto primero. No solo se puede disfrutar de un buen espectáculo yendo al teatro. Leed diálogos y comprended la dificultad de explicar una historia utilizando únicamente la voz de los personajes. Conversaciones en un solo lugar, descrito al detalle para que los lectores puedan imaginar al dedillo la composición. Pasad, disfrutad de la lectura de una buena obra donde tu astucia, para conocer los entresijos de la historia, y tu propia imaginación cobran una especial importancia.


Asistir al teatro hoy en día es, en parte, también gracias a los griegos, porque allí nació. Es por eso que vemos necesario hablaros de la creación de estas representaciones.
Su origen parece ser de unos cantos y danzas que realizaban en honor del dios Dionisio y que, en cierto momento se especializaron. Obviamente, hubo un momento en el que algún miembro de ese coro debió pasar a recitar, adoptando el papel de actor. A partir de aquí nació el teatro griego, y, el teatro occidental.
En las obras se incluían música y danzas, empleaban máscaras y un vestuario especial para caracterizar a los actores, siempre hombres que desempeñaban también papeles femeninos (Sí, los griegos trazaron las bases de la cultura de occidente tal y como la conocemos pero se perdieron en algo tan simple como en respetar a las mujeres...)
Principios del IV a. C (época clásica), los teatro se llenaban, era la época de máximo esplendor y estaban abierto tanto a atenienses como a extranjeros, aunque hay dudas si a mujeres y a esclavos.
Destacamos al autor de comedias Aristófanes (455-385 a. C). Vivió en Atenas entre el gobierno de Pericles (que se caracteriza por ser un periodo con grandes logros y por un desarrollo esplendido de la ciudad de Atenas, la ginda de su mandato fue la costrucción del Acrópolis y, dentro de este espacio, su edifico más colosal y conocido: el Partenón) y la guerra del Peloponeso, esto le influyo de tal manera que sus obras son críticas a los efectos de la guerra y a sus políticos.


Usa un lenguaje cuidado y solemne mezclado con la jerga popular grosera y obscena, destacando sus juegos de palabras que resultan intraducibles, y que, inevitablemente, se han perdido en las adaptaciones, pero se han conservado muchos otros que merecen la pena. Un elemento fundamental en todas sus representaciones es la sexualidad y su combinación de parodia y seriedad.
Sus diálogos se han realizado a lo largo de los siglos, escribió 44, de los que han llegado 11, uno de ellos, y el más conocido es Lisistrata.
Esta obra de teatro ha sido representada en muchas ocasiones además de haber sido llevada a la gran pantalla por el cineasta Francesc Bellmunt y protagonizada por la actriz española Maribel Verdú.

Lisistrata (411 a.C.), es una sátira sobre la guerra en la que las mujeres luchan por la paz practicando el celibato. Lisístrata es el nombre de la mujer de un soldado ateniense, que cansada de las continuas guerras entre Atenas y Esparta da con la solución perfecta para llegar a la paz: decide convencer a todas las mujeres de ambos bandos de que no copulen con sus esposos hasta que éstos dejen de luchar. Al final de la obra, los hombres, desesperados por la falta de sexo, deciden acabar con la lucha y así poner fin a la huelga de piernas cruzadas de sus mujeres. Una estrategia que tendrá éxito y que dará lugar a unas escenas verdaderamente cómicas.
Es un alegato contra la guerra divertido y original. Un obra clásica con todo los componentes de las actuales.
Aquí os dejo un fragmento, donde podemos observar la sexualidad que tanto define a las obras de Aristófanes. Sorprende al lector como el pensamiento de una época y de una sociedad no deja al autor indiferente y se expresa con todo un alegato sobre el sometimiento de la mujer. Así como también otros temas de tan actualidad que aborda: machismo, política, guerras, el movimiento feminista, etc.


-Lisístrata: ¡Estas mujeres! Las invitas a una bacanal y no se puede ni entrar; vienen todas volando y ¡ala! a tocar el timbal. Pero para esto, en cambio, no se presenta ni una. Calla, que aquí viene la vecina. ¡Buenos días, Kalonike!

-Kalonike: Buenos días, Lisístrata. ¿Que pasa, que estas preocupada? ¡Hija, no pongas esta cara! ¡No te favorece nada!

-Lisístrata: ¡Es que se me enciende la sangre!¡Damos pena, las mujeres! ¡Para empezar, los hombres nos tienen por unas sinvergüenzas!

-Kalonike: ¡Porque lo somos!

-Lisístrata: Las convoco por una cuestión de vida o muerte que tenemos que tratar y mira, ellas durmiendo, no aparecen.

-Kalonike: Ya vendrán, mujer. ¿No ves que no podemos salir de casa así como así? Tenemos que estar por el marido, por la esclava, cuidar de los niños, hacer la sopa, la colada…

-Lisístrata: Sí, ¡pero hay cosas más urgentes y penetrantes!

-Kalonike: ¿Cosas penetrantes, dices? ¿Y como son de gordas?

-Lisístrata: ¡Uy, muy gordas!

-Kalonike: ¡Coño! ¡Y que esperan para venir!

-Lisístrata: No, no es lo que imaginas. Ya estarían todas aquí, si fuera eso. No, no. Hace días que me ronda por la cabeza una cosa que me hurga cada noche y me quita el sueño.

-Kalonike: ¡Ah, debe ser una cosa fina! ¿Y quieres decir que es por la cabeza por dónde te ronda? ¡Si tanto te hurga!

-Lisístrata: ¿Otra vez con eso? Sí, señora, una cosa muy fina. Los hombres son unos bestias. Tendríamos que agarrarlos y…

-Kalonike: ¿Por donde?

-Lisístrata: ¡Y dale! Es la salvación de Grecia la que proyecto. De las mujeres, sí, de las mujeres depende…

-Kalonike: ¡Pues sí que estamos bien!